viernes, 23 de mayo de 2008

A LOS VAMPIROS ANIMICOS







Esta poesía, salió de la ausencia de esas personas que todos conoceréis, invasores temporales de vuestra vida y vuestro tiempo... hasta que se van sin un adiós.




Aparecen insolentes y se cuelan en mi vida,
agarran todo, mi fuerza, mi dedicación, mi sueño,
me agotan con sus exigencias, sus ganas de mí.
Les entrego todo, mi voz, mi amistad, mi interés...
les escucho, les leo, les calmo, les animo;
me desnudo ante ellos, se desnudan ante mí.

Mi piel es auténtica, siempre puede sangrar
con el arañazo de una mala palabra, un desprecio,
sus pieles son sintéticas, nunca sangrarán,
tan sólo arderán rápidamente, dejando la nada.

Un día amanece; el horizonte vacío,
ya no hay voces, no hay letras,
no hay confidencias, ya no hay risas...
ese día el sol quema, nada te abriga,
nada te hace sombra.

Los vampiros anímicos
ya no encontraban sustancia en mí
y vuelan en busca de otras almas;
comenzará de nuevo la historia,
pero ya no seré la protagonista,
otras venas darán vida a estos
viajeros incansables.


Creative Commons License
Esta obra está bajo una licencia Creative Commons.

No hay comentarios: