
En los días en que conscientemente hago ejercicio
de reflexión, pienso en determinados comportamientos del ser humano que a mí desde muy joven me producen un asco literal.
Han pasado los años y la hipocresía sigue ganando adeptos, el terreno hoy en día está aún más abonado si cabe para que estos seres se críen y pueblen la tierra... no hay fronteras que los limiten, sus reinos empiezan a ser territorios donde nunca sale el sol.
ESBOZAN SIN ESFUERZO LA SONRISA,
SUJETADAS CON ACERO LAS COMISURAS
CON MENTIRAS Y FALACIAS,
RELUCEN DE NEGROS,
LOS DIENTES DE LA INSIDIA,
BAÑADOS EN EL DOLO Y EL ENGAÑO.
ALCANZAN PRESTOS TU PASO,
UNA FRÍA MANO SE POSA EN TU ESPALDA
Y SIENTES LA TRAICIÓN EN SU TACTO,
INTENTAS RESISTIR EL EMPUJE,
PERO VAS AL DURO SUELO SIN REMEDIO,
ATURDIDO Y DESESPERADO.
ALZAS LOS OJOS ENJUGADOS,
CON EL DOLOR DEL SENTIMIENTO HERIDO
Y CONTEMPLAS SU CINISMO,
BRILLA SIN PODER OCULTARSE,
EN SUS PUPILAS DILATADAS,
TU SANGRE VERTIDA ES SU TRIUNFO.

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