jueves, 19 de marzo de 2009

OLVIDA





El sueño que a duras penas respiraba...
se desvanece. Al final la certeza de
la vida secciona la ilusión del corazón.








Olvida, aprisiona el corazón
con los cordones del recuerdo...
y olvida.


Imaginaste que dentro de ti,
con su fuerza eras invencible
y creiste en el señuelo de la felicidad;
pero tus armas, son calamina
en los campos ardientes del destino,
la fuerza de tu alma,
estuvo sola, el amor incansable
era el tuyo, el otro corazón
no se entregó en igual medida.

Ahora, olvida y camina,
tus pies anduvieron cada día,
tras la estela de su amor,
ahora irán en la senda de la vida,
palpitando la sonrisa sobre las lágrimas.

Apaga la luz,
camina de nuevo en la penumbra,
la esperanza te guia... siempre lo hizo.



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3 comentarios:

Anónimo dijo...

Para dejar las cosas claras pese a lo que, a continuación, se me ocurra expresar: Siento, casi, casi, aversión contra la pornografía. Entre otras cosas, porque busca emociones, en ocasiones, cada vez más fuertes... Y, éso, a veces, puede convertirse en inhumano ( ¿ recuerdas la película "Instinto básico"?...; en ella se aprecia un pequeño ejemplo de lo que digo). Pero lo tuyo, a mí me parece que no tiene nada que ver con ese rollo. Lo tuyo -tu blog: lo que en él expresas- es mucho más auténtico. Sí que tiene que ver con el erotismo, claro está; pero el erotismo, en sí, es bello. No es sucio. O, al menos, a mí, así me lo parece. Pero, también, tiene que ver con muchas otras cosas más. Alude a sentimentos muy humanos. Que atañen al "sufrir" y al "gozar" que constituyen, ineludiblemente, nuestro "vivir". Y éso, en el fondo, es "muy serio". O sea, "muy importante". Si a ello le añadimos el gusto estético que demuestras al mostrar tus sentimientos o elegir esos fotogramas o esa música... entonces, personalidades como la mía no pueden sentirse indiferentes, sino "a gusto" o "a disgusto". En mi caso, más lo segundo que lo primero. Te conocí en un comentario que hacías en "El parto de los montes", uno de los artículos publicados por César Vidal en su blog de "Libertad Digital". Y, desde entonces, quedé un poco enganchado. Por ello, de vez en cuando, "curioseo" en tu blog, sin sentirme culpable, lo cual, ya, es una ventaja. Es verdad que contigo me pasa como me pasa con casi todas mis cosas y las personas a mí relacionadas: que me puedo tirar meses sin acordarme de que existen. Ello se debe, supongo, a absurdas obsesiones existenciales o del vivir de cada día, no lo sé... Lo que sí sé es que por no darles carta de naturaleza no me molesto , apenas, en analizar. Por ello, si me encuentro, por casualidad - pues nunca lo he buscado, al menos, hasta la fecha-, con algo asi como este blog, lógicamente, mi cuerpo ( sí; inclusive mi cuerpo, de alguna manera) y mi psicología reaccionan. Es por ello que considero una suerte el haberme encontrado con él. Es como zambullirme en un mar en calma. Tú te realizas y los demás entramos en un Nirvana...La compensación mutua entre tú como agente individual emisora y cada uno de nosotros como agentes individuales receptores redunda en armonía. Y donde habita la armonía, ¿no es en el Reino de la Belleza?...Y la BELLEZA, ¿no es el BIEN?... (¡según PLATÓN..., claro!; pero me inclinaría a creer que, también, quizás, según tú y según yo...; Aunque no te quiero implicar: tú eres dueña de tu persona y sabrás un millón de veces mejor que yo lo que piensas e intuirás otro millón de veces mejor que yo lo que sientes). Ha sido -y sigue siéndolo, faltaría más...- un placer haberte conocido. Soy consciente de que me he excedido en la extensión de este comentario. Pero si dividiésemos el número de lineas que lo integran entre el número de veces que habré entrado al blog- aunque sólo sea para echar un vistazo y no leer- es casi seguro que no sale a más de una linea por visita. Así pues, lo uno por lo otro... Supongo que eso me hace acreeedor al "perdón sin penitencia".( Se nota que mi formación es judeocristiana... ). De todas formas, perdona tú y los posibles lectores de este comentario por la desmesurada extensión del mismo. Si entro en alguna otra ocasión - espero que sí, pues no hay nada malo en ello, sino todo lo contrario- no volverá a suceder. SUFRIDOR entre SUFRIDORES.

El instante de Dánae dijo...

Hola anónimo. Siento que no tengas ni un nombre simbólico al que poder dirigirme con estas letras. Mi blog llevaba mucho tiempo sin recibir comentarios, estaba triste por ello. Hoy al leer el tuyo, magnífico, directo y tan halagador, qué duda cabe que los días que he estado sin escribir aquí, han sido un error, pero cuando falta la inspiración escribir cualquier cosa sería casi un delito y mi orgullo no me lo permite. Es posible que ni inspirada escriba textos interesantes, pero lo intento, que lo sienta y que a la vez transmita a los demás sensaciones, lo importante es sentir.

No sé sí te equivocas, creo entender que te sientes a disgusto al leerme, pero es posible que sea un lapsus ya que se contradice con el resto de tu escrito.

Muchas gracias por extenderte, ha sido delicioso leerte. Cualquiera que aspire a escribir, espera alguna vez, recibir comentarios como el tuyo. Un placer. Dánae.

Antonio M. dijo...

Muy buenas. Ya hacia tiempo que no me pasaba por aqui (entre problemas de salud y problemas informaticos, la verdad es que ultimamente no me conecto con tanta asiduidad como solia hacerlo). Asi que hoy he querido dejarte un saludo. Veo que la inspiracion para escribir no te abandona. Como dice el amigo anonimo (o la amiga anonima) da gusto leerte. Bueno, pues espero que todo te vaya bien. Por aqui nos iremos leyendo...

Un abrazo, que son gratis. :)